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Nuestra lucha no es contra sangre y carne…

Desde tiempos muy antiguos y en todas las edades, aquellos que respetan y aman a Dios han tenido que lidiar con hombres y mujeres que los han despreciado, en muchos casos, en forma violenta y evidente, y en muchos otros, en formas mucho más sutiles e imperceptibles.

Una de las formas en que este desprecio se ha manifestado es buscando instalar la idea en la sociedad de que Dios y la Biblia son temas antiguos, pasados de moda, y por los cuales buena parte de la humanidad está sumida en la culpa, el pecado y la derrota.

Esta manera engañosa de conducirse, confunde a Dios y a La Biblia con las religiones, a veces sin saberlo y en muchas otras, apropósito.

Salmos 1:1

Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,

Ni estuvo en camino de pecadores,

Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

Este versículo presenta un incremento gradual en la maldad. Consejo de malos (ideas), Camino de pecadores (prácticas), Silla de escarnecedores (asociarse con los burladores)

La palabra “escarnecedores”, significa “uno que se mofa, o uno que se burla”

Los escarnecedores y burladores, hoy están a la orden del día, y dado que a nadie le gusta ser objeto de burla, muchos Cristianos ponen en juego sus convicciones para no parecer un fanático o alguien que ama a Dios, como si amar a Dios debiera darnos vergüenza.

Los líderes en todas sus facetas, los estados, las organizaciones, las empresas, los medios de comunicación, las religiones y hasta algunos movimientos cristianos se manejan hoy por “encuestas”, buscando conducir sus iniciativas en función de “caerle bien a la gente”. Ya queda muy poca gente que tiene la valentía para defender sus convicciones.

Esto me recuerda a la famosa frase de Groucho Marx, “estas son mis convicciones, y si no les gusta, tengo otras…”

Muchos líderes, al ver decaer la participación de sus seguidores y en especial, sus ingresos en forma de impuestos, aportes, limosnas, diezmos, ofrendas y cualquier otra similar, están dispuestos a promover una doctrina totalmente opuesta a la que han sostenido por décadas o siglos, sin mediar argumentos honestos que den sustento a esos cambios. Tarde o temprano, cuando esto ocurre, los destinos de aquellos que son conducidos por estos líderes acomodaticios, será más y más frustración.

2º Timoteo 4:1-4

Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino,

que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.

Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán (no soportarán) la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias (pasiones carnales),

y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.

Una cosa es la verdad, la Palabra de Dios (Juan 17:17), y otra muy diferente una fábula, y ambas conducen a las personas a lugares y circunstancias diferentes.

Hoy hay maestros para todo…pero muy pocos predican la palabra, ya que se prefiere sostener aquello que sea conforme a lo que la gente quiere escuchar.

¿La instrucción ante esta realidad hoy tan presente en nuestras sociedades? Predicar la Palabra de Dios, con toda paciencia y doctrina.

1º Juan 3:13

Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece.

1º Juan 4:4, 5

Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.

Ellos son del mundo; por eso hablan del mundo, y el mundo los oye.

1º Juan 2:15-17

No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.

Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.

Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.

Llegará un día en el cual, los burladores y escarnecedores deberán dar cuenta de sus actos, y allí no será la justicia humana, siempre parcial e imperfecta, la que dará el veredicto.

Proverbios 16:18-20

Antes del quebrantamiento es la soberbia,

Y antes de la caída la altivez de espíritu.

Mejor es humillar el espíritu con los humildes

Que repartir despojos con los soberbios.

El entendido en la palabra hallará el bien,

Y el que confía en Jehová es bienaventurado.



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